La frase del mes

"...Yo no estoy contra la policía, simplemente me da miedo..." (Alfred Hitchcock)

06 abril 2008

El alma de Janis Joplin la descubrí en San Pedro

Janis Joplin tenía una voz aguda, en gritos podía agujerear los sentimientos de cualquier corazón blusero. Natalia tiene registrode contra alto. Janis murió con apenas 27 años sumida en una profunda depresión por desamores y sobredosis de heroína. Natalia tiene 28 y piensa seguir mucho tiempo con la música. Pero entonces ¿qué tiene que ver Natalia Barrios, cantante de la zona oeste con la texana Janis Lyn Joplin, una cantante que apenas asomaba la década del 70 revolucionó para siempre la forma de cantar bluses? Más aún, saliendome de las formalidades podría decir ¡quién diablos es Natalia Barrios! Por ahora una desconocida. Una desconocida que descubrí en un escenario sanpedrino durante un Festival de Blues en un pequeño teatro de mi pueblo de nacimiento. Una ignota cantante que con su banda decidió sumarse a ese encuentro de Semana Santa con su propuesta: Tributo a Janis Joplin.

Descubrí semejante hazaña gracias a un volante pegado en una columna de luz. Supuse que quien pretendía homenajear a Janis Joplin debía tener al menos un buen ángel que lo protegiera. ¿Para qué sumirse en semejante osadía? ¿Por qué buscar el camino más difícil para mostrar talento? Podía ser un tremendo fracaso. Pero no.

Consciente o no de todas las jugadas que le corrían en contra, Natalia Barrios subió para mostrar la voz que le brota desde las entrañas. Una voz que no intenta imitar a la de Janis. Porque, como dije, no es igual a la creadora del notable solo a capella “Mercedes Benz” o el agresivo “Move Over”, por citar algunos de esos éxitos. Los registros son bien diferentes. Las vivencias y los tiempos históricos son bien diferentes también. Entonces, ¿dónde está el secreto para que esta chica me guste tanto? Creo tener la respuesta, la honestidad que tiene para cantar. Y el talento, por qué no. Es bien difícil querer ser Janis. Por eso Natalia eligió serlo desde lo que ella era: desde la transparencia, sintiendo cada palabra. Siendo consciente de la historia que Joplin quería contar.

La banda impacta desde el primer minuto. Y esa sorpresa, nuevamente, no es sólo por lo musical. Es tambén por la apuesta escenográfica: todos suben con vestimentas de hippies, ¡tienen aspecto de hippies! Ropas coloridas, barbas, sombrero alto sobre la cabeza de Natalia y una peluca extravagante. Así era Janis. Loca, desencajada, sin medir un solo segundo sus actos. Por lo menos así lo entienden estos chicos a los que, dicen, los ha tocado la mismísima alma de Janis Joplin para hacer sus vidas más placenteras. Las de ellos y las del público, que aplauden cada tema con ganas, sorprendidos de ver en escena a jóvenes tan desconocidos como profesionales.

El relato que Natalia despliega entre tema y tema sobre la vida de Pearl acompaña muy bien este show. La banda es compacta en todo momento y los puntos más altos del recital (“Cry Baby”, sin lugar a dudas) son muy bien acompañados, otra vez para deleite y descubrimiento del espectador, por la corista del grupo que con una personalidad calma, casi pasando desapercibida, despliega una voz furiosa, casi erótica, en sintonía con la propuesta de Natalia Barrios.

“Este es el primer recital que hacemos en público”, cuentan los integrantes de La Heroína del Blues (¿sarcasmo en el título?), Tributo a Janis Joplin, casi como excusándose. Pero no hace falta. Sólo se espera, espero, que la propuesta siga creciendo. Sin descuidar la musicalidad ni lo teatral del espectáculo. Sin pilotos automáticos. Con la mente y el espíritu comprometidos permanentemente con quien pretenden representar: el alma de la propia Janis.


La Heroína del Blues, Tributo a Janis Joplin:

Natalia Barrios : Voz
Marcelo Rolando: Guitarra líder y coros
Emiliano Casiraghie: Guitarra rítmica y coros
Leonardo Campos: Bajo
Facundo Rodríguez: Batería
Gabriel Yannattone: Teclados



boomp3.com
Clic aquí para escuchar la entrevista en el programa radial Utopias en FM, por la 90.1 Mhz, sábado 5 de abril de 2008.

02 abril 2008

El malestar que me produce la indefinición, o el miedo de entrar en una polaridad sin sentido

El viernes pasado participe de una reunion del Movimiento por Buenos Aires. Me parecia necesario poder adoptar una postura en estos dias de batallas ¿ideológicas? La charla con los compañeros, y las definiciones presentadas por Claudio Lozano fueron un páramo ante tantas distorsiones. Pero desgraciadamente, y pese al esfuerzo de penamiento en conjunto, no terminó de cerrarme esa idea que quería cerrar, aunqué sí descubrí que tampoco era necesario. Y es que a partir del debate puedo alumbrar la idea de que es el mismo gobierno quien te lleva a pensar por blanco o negro, rico o pobre, bueno o malo. Y no estoy completamente seguro que esto sea así. Más allá de que el medio es tirano, y su influencia innegable, la piña de D'elía al cacerolero, la presencia de Moyano en el palco junto a Cristina... me siguen pareciendo símbolos aberrantes para nuestra democracia. Símbolos de que en este país las leyes deben imponerse a fuerza de golpes, de bastones y picanas en épocas pasadas, y de palos y trompadas, ahora en este momento. Se lo podría enseñar a mis hijos a ver que opinan...

Es cierto que hacía mucho que no veía tanta actividad política como ahora. Y aunque hay actos patoteriles de por medio, la Argentina hoy es un caldero político. Los ciudadanos empezamos a ver que participar y decir es parte del juego de esta democracia y TIENE peso. Sin embargo, creo que resumir algunas posturas políticas por la cantidad de gente que copa una plaza, lo único que hace es sumar más a esas contradicciones permanentes que me acechan. Y esas contradicciones, el no poder explayarme claramente me aterran un poco. Porque aunque parezca ingenuo no quiero que se convierta en MI forma de pensar. No quiero asistir a una lucha ajenamente. No es lo que espero de mí mismo.

Algunas cuestiones políticas las puedo definir con claridad. Mal que le pese a las Cecilias Pando del país, me parece que mezclar Derechos Humanos, el hecho de poner siempre ante cualquier causa el tema de los Derechos Humanos como un símbolo de presión para mostrar lo "razonable" de una medida, no le hace bien a nadie. No se puede poner en una misma balanza un tema tan sensible como los Derechos Humanos con un tema de retenciones. Por eso me pareció muy inteligente cuando hoy, el compañero Buzzi, de la Federación Agraria, comenzó el discurso que planteaba la tregua por 30 días, nombrando a otros compañeros desaparecidos durante la última dictadura militar. Me pareció MUY inteligente. Con mayúsculas. Destacable en verdad. Le dio cierre a dos temas que podían generar dudas: a los K del gobierno que quieren acaparar la lucha por los Derechos Humanos como bandera propia, y a algún que otro cacerolero o chacarero, que agazapado entre la muchedumbre pretenda hacer de esta lucha legítima un momento propicio para cosechar espíritus pro golpistas. Ah, y un tercer tema también pudo disipar en su claro discurso de hoy a la tarde: las dudas que pudo despertar en algún que otro compañero al verlo "demasiado" cerca de la Sociedad Rural Argentina en la lucha de estos 20 días.

La sencillez con la que la gente de la Federación Agraria explicó cómo es el funcionamiento de este sistema que propone el gobierno es maravillosa. Y me queda claro entonces, que si bien las retenciones son necesarias para los grandes exportadores, estas deberían ser escalonadas, según se trate de pequeños, medianos o grandes productores. O algo así. Pero claro. El gobierno juega en un sistema capitalista y parece que no se anima, o no quiere, tener a los gordos del campo en contra. Si hubiera habido otra meta diferente a la de atar voluntades, por qué no llevó esta discusión al Congreso, por qué no generó y propuso el diálogo y consenso necesarios previos a la puesta en marcha del sistema...

Por último, no quiero dejar pasar de largo, un tema tan complicado como el gesto de Hebe de Bonafini. Me pregunto si este tema, esta presidenta, merecía el gesto de tener el pañuelo blanco de manos de Hebe? ¿Era el contexto, el momento justo? Es verdad que este gobierno como ningún otro ha puesto sobre el tapete temas como el genocidio de los dictadores del 70, pero de ahí a convertirlos en próceres de la lucha por los Derechos Humanos cuando se habla de retenciones... es por lo menos no pensar en el horror que vivieron miles y miles de hombres y mujeres en esos años de terrorismo de Estado... Es insultar, poner en contra, a compañeros del campo que han sufrido en carne propia esa tiranía. ¿O el dolor de ellos es menor por no coincidir con una política económica? ¿Hacía falta ese gesto? me pregunto una y otra vez. ¿Hacía falta una plaza peronista otra vez? Tanto discurso, tanta marcha, tanto corte... y otra vez el fantasma de quedar indefinido en el medio de tanto movimiento político. La típica indefinición de un ciudadano cuasi clase media. El típico argentino avestruz que no quiero ser.


CARAS Y CARETAS DEL PARO AGRARIO


Alfredo De Angelis: Me sorprendió su polenta. No sé cuál es su posición política en general, cuánta disposición a dialogar tiene, aunque parece serle fiel a quienes representa.


Cristina Fernández de Kirchner: Lindos discursos. Irresponsable. Siempre llevando las discusiones a las antinomias, que tan mal le hacen a nuestra democracia.
Eduardo Buzzi, Federación Agraria: Buen piloto de tormenta. Supo captar que debe serle fiel a sus representados y alejarse con sus discursos de las formas pro golpistas de la Sociedad Rural.